Puerta de los demonios

Tienes un plan genial. Subir dos picos de montaña y luego ir a la Puerta del Diablo. Eso ya es bastante hacia la tercera cima.

La Puerta del Diablo no me pasó por alto. Habrá más sobre eso...

La ejecución fue muy divertida. Muy diferente a hacer senderismo en la montaña. La primera cima fue manejable, la segunda y la montaña más alta realmente fue difícil. Muy empinada. Abajo también había una advertencia de que esa montaña sería muy pesada y peligrosa. Pero bueno, así soy con esas cosas, también suena como un bonito desafío. Después de todo, tienes un plan y lo vas a hacer.
Resultó ser manejable, pero ciertamente exigente con algunos tramos emocionantes.

En algunos lugares ya no era hacer senderismo, sino escalar. Ya sabes; con los pies y las manos.

La vista era realmente hermosa. Veías todo.

Luego todavía hacia abajo y otra vez hacia arriba a la Puerta del Diablo.
En la fila para una foto.

Luego completamente hacia abajo por un camino de sherpa. Sí, lo lees correctamente, los noruegos realmente trajeron sherpas para construir hermosos senderos de montaña con escaleras de grandes trozos de piedra.

Con el bonito camino hacia abajo, noté que no podía caminar muy recto. Tuve mucha dificultad en el descenso. Abajo, en el pueblo, caminé un poco cojeando hacia un lugar para comer. A veces se me doblaban un poco las piernas.

Por lo demás, todo bien, esto es lo que obtienes cuando la intensidad resulta un poco más alta de lo esperado. Y escalar es realmente diferente de andar en bicicleta. Así que en realidad he subido tres montañas sin entrenamiento, pero lo logré bien.

Los últimos kilómetros tomé un taxi al camping.
Así que sí, la Puerta del Diablo no me pasó por alto.
¡Pero estoy contento de haberlo hecho!

Ahora resulta que me he torcido un poco el músculo durante el descenso. Afortunadamente, andar en bicicleta va razonablemente bien, pero caminar todavía es un poco difícil.